miércoles, 24 de noviembre de 2010

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...y en la noche, se cava tu ausencia, ese hueco impreciso en alguna parte de mi cuerpo. Hormigas, como corrientes eléctricas se devoran mi tierra, mi carne, mis fuerzas. Llevo meses siendo devorado, siento infinitos pasillos oscuros adentro, por los cuales circulan las hormigas llevándose mis desperdicios...


¡Hundirse en la noche! Así como a veces se sumerge la cabeza en el pecho para reflexionar, sumergirse por completo en la noche. Alrededor duermen, los hombres.
Un pequeño espectáculo, un autoengaño inocente, es el de dormir en casas, en camas sólidas, bajo techo seguro, estirados o encogidos, sobre colchones, entre sábanas, bajo mantas; en realidad se han encontrado reunidos como antes una vez y como después en una comarca desierta: Un campamento al raso, una inabarcable cantidad de personas, un ejército, un pueblo bajo un cielo frío, sobre una tierra fría, arrojados al suelo allí donde antes se estuvo de pie, con la frente contra el brazo, y la cara contra el suelo, respirando pausadamente. Y tú velas, eres uno de los vigías, hallas al prójimo agitando el leño encendido que cogiste del montón de astillas, junto a ti. ¿Por qué velas? Alguien tiene que velar, se ha dicho. Alguien tiene que estar ahí.

                 De Noche - Franz Kafka

5 comentarios:

  1. Eso que se nos come por dentro, como la carcoma y que a veces duele, pero con un dolor tan sutil...

    Hoy me dejó impresionado la música. "The Airborne Toxic Event - Sometime Around Midnight acoustic.

    Un abrazo desde mi propio infierno de espectación.

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  2. Quizá algún día cruce el viejo océano para verte un instante...

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  3. un alto en mi camino... me quedaré a leer un ratito, con tu permiso, claro

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  4. Pasaba a desearte felices fiestas!
    te dejo un abrazo..

    pd. por cierto.. tenemos la misma piel

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